viernes, 1 de agosto de 2008

Fauna de Japón

Despues de pasar la noche en el hotel, (no en la cama sino admirando el wc cibernético) me dirigí hacia el parque Ueno y ya que estaba allí entré en el zoo del parque. Pensé:
-Desde que murió Chu-lín (o era el mayordomo de Angela Chaning?, siempre me confundo) no he visto un oso panda en vivo.
Dos meses despues el Gobierno Chino regala 2 pandas al zoo de Madrid... tambien es casualidad.
Total, que el Zoo de Ueno me decepcionó. Está bien, pero los bichos son iguales en todas partes. Japón no era tan diferente despues de todo.

Gran instantánea del oso panda que saqué en Tokyo

Salí de Ueno y me perdí. Pregunté a un policía... craso error. Que pesao, si no sabes dilo y ya está pero deja de llamar a gente a ver si ellos lo saben... Me despedí del 4º regimiento de policia con varias inclinaciones, miles de arigatos gosaimass y en cuanto doblé una esquina salí corriendo.
Hice un descansito para comer un McMegaterayaki (cuando viajas es fundamental probar la cocina del país)y me dirigí a Akihabara.
Allí solo había frikis, tiendas de consolas y tías vestidas de criada repartiendo clinex... (Sabía que a los japoneses les iba ese rollo, pero que las propias empleadas les den los clinex me parece una incitación a masturbarse). En fin, me crucé con un grupito de criadas y saqué la camara, les hice una foto y acto seguido se taparon la cara... ¡Pues si te da vergüenza tu trabajo buscate otro!, les espeté mientras me miraban raro...

Congreso de criadas antes de darse cuenta de mi presencia

A la hora de cenar me metí en un Yoshinoda, que es una cadena de restaurantes de ramen y estas cosas. Mi madre siempre me dice que lo de comer deprisa engorda, pero ¡es mentira! En lo que comí yo acabaron cinco tíos en el taburete de al lado, visto y no visto. Algunos cuando se iban llevaban los fideos colgando de los morros...
Con un principio de epilepsia por los neones me fuí a dormir mi última noche en Tokyo. Al día siguiente me dirigiría hacia el Monte Fuji y Hakone.

Se me achinarían los ojos? ¿me detendría la policía por hacer fotos a criadas?(suena surrealista eh?)
Todo esto y mucho más en el próximo capitulo del rancio en Apón.


CONTINUARÁ

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